viernes, 16 de julio de 2010
INVESTIGADORES
Detectan cómo bloquear el VIH
La técnica usada por los investigadores podría utilizarse para desarrollar vacunas contra numerosas enfermedades.
Detectan cómo bloquear el VIH
La técnica usada por los investigadores podría utilizarse para desarrollar vacunas contra numerosas enfermedades.
AFP
Washington
Washington
Investigadores descubrieron dos poderosos anticuerpos capaces de bloquear, en laboratorio, la mayoría de las cepas conocidas del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) abriendo así potencialmente la vía a una vacuna anti-sida eficaz, según sus trabajos publicados el jueves.
Más de un cuarto de siglo después de la identificación del virus del VIH responsable de casi 30 millones de muertes, la búsqueda de una vacuna contra la infección sigue siendo infructuosa a pesar de la amplitud de los esfuerzos de la comunidad internacional y de los recursos utilizados.
Pero estos dos antigenes, bautizados VRCO1 y VRCO2, parecen muy prometedores impidiendo la infección de células humanas para más del 90% de las variedades del VIH en circulación, y con una eficacia sin precedentes.
Los autores de estos trabajos, publicados en la revista estadounidense Science del 9 de julio, desmontaron también el mecanismo biológico mediante el cual estos anticuerpos bloquean el virus.
“El descubrimiento de estos antígenos de poderes excepcionalmente extendidos de neutralización del VIH y el análisis que explica cómo operan representan avances exultantes para descubrir una vacuna capaz de proteger de manera extendida contra el virus del sida”, se congratuló el doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional Estadounidense de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID).
Más de un cuarto de siglo después de la identificación del virus del VIH responsable de casi 30 millones de muertes, la búsqueda de una vacuna contra la infección sigue siendo infructuosa a pesar de la amplitud de los esfuerzos de la comunidad internacional y de los recursos utilizados.
Pero estos dos antigenes, bautizados VRCO1 y VRCO2, parecen muy prometedores impidiendo la infección de células humanas para más del 90% de las variedades del VIH en circulación, y con una eficacia sin precedentes.
Los autores de estos trabajos, publicados en la revista estadounidense Science del 9 de julio, desmontaron también el mecanismo biológico mediante el cual estos anticuerpos bloquean el virus.
“El descubrimiento de estos antígenos de poderes excepcionalmente extendidos de neutralización del VIH y el análisis que explica cómo operan representan avances exultantes para descubrir una vacuna capaz de proteger de manera extendida contra el virus del sida”, se congratuló el doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional Estadounidense de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID).
Tomar té parece prevenir el cáncer de ovario
El viejo y querido hábito de tomar un té parece ser especialmente bueno para las mujeres. Las damas que consumen más de 4 tazas al día de té verde, negro o de hierbas parecen tener un riesgo marcadamente menor de desarrollar cáncer de ovario.
El viejo y querido hábito de tomar un té quizás sea especialmente bueno para las mujeres. Las damas que consumen más de cuatro tazas al día de té verde, negro o de hierbas parecen tener un riesgo marcadamente menor de desarrollar un cáncer de ovario, concluyó una nueva investigación.
Christina Nagle, del Instituto de Investigación Médica de Queensland (Australia) explicó que estudios previos en animales habían sugerido este beneficio del té, "pero nuestra investigación apoya la idea de que los antioxidantes del té pueden ser beneficiosos en la lucha contra el cáncer en los humanos".
UN MAL PARA TEMER
El cáncer de ovario es una patología a tener en cuenta ya que representa el quinto cáncer con más incidencia en las mujeres. Además, el 75% de los casos se diagnostica cuando la enfermedad se encuentra en una fase avanzada, por lo cual generalmente ya se expandió a los otros órganos del cuerpo.
Este mal no es fácil de identificar debido a la ambigüedad de sus síntomas, que incluyen principalmente la distensión del abdomen, las molestias al comer y el dolor en la pelvis o el abdomen. En algunos casos va acompañado de ciclos menstruales irregulares, estreñimiento, falta de hambre, náuseas, dolor en el abdomen y sangrado vaginal, entre otros.
"Cuánto más pronto sea el diagnóstico, mejores son las posibilidades de sobrevivir. Cuantas más mujeres sepan del cáncer de ovario y de sus síntomas, mejor será", dijo Nagle.
LOS MEJORES TÉS
Para analizar el posible rol del té en la prevención de esta patología, los investigadores trabajaron con 2.700 mujeres. La mitad de ellas sufría de cáncer de ovario y la otra mitad estaba sana. Cada voluntaria respondió un cuestionario detallado sobre su dieta y estilo de vida, incluyendo el consumo diario del té.
"Nuestros resultados indican que tomar más de cuatro tazas por día de té negro, verde o de hierbas reduce el riesgo de sufrir cáncer de ovario en un 30%", dijo Nagle.
"Se cree que el té verde es el más sano de todos. Aunque los resultados de nuestro estudio no muestran un efecto más fuerte del té verde, la combinación de la evidencia de todo el mundo sugiere que tomar una o más tazas por día de esta infusión podría reducir en un 40% el riesgo de desarrollar un cáncer de ovario. Sin embargo, esto debe ser confirmado con más investigaciones", concluyó la autora.
NEOMUNDO
El viejo y querido hábito de tomar un té quizás sea especialmente bueno para las mujeres. Las damas que consumen más de cuatro tazas al día de té verde, negro o de hierbas parecen tener un riesgo marcadamente menor de desarrollar un cáncer de ovario, concluyó una nueva investigación.
Christina Nagle, del Instituto de Investigación Médica de Queensland (Australia) explicó que estudios previos en animales habían sugerido este beneficio del té, "pero nuestra investigación apoya la idea de que los antioxidantes del té pueden ser beneficiosos en la lucha contra el cáncer en los humanos".
UN MAL PARA TEMER
El cáncer de ovario es una patología a tener en cuenta ya que representa el quinto cáncer con más incidencia en las mujeres. Además, el 75% de los casos se diagnostica cuando la enfermedad se encuentra en una fase avanzada, por lo cual generalmente ya se expandió a los otros órganos del cuerpo.
Este mal no es fácil de identificar debido a la ambigüedad de sus síntomas, que incluyen principalmente la distensión del abdomen, las molestias al comer y el dolor en la pelvis o el abdomen. En algunos casos va acompañado de ciclos menstruales irregulares, estreñimiento, falta de hambre, náuseas, dolor en el abdomen y sangrado vaginal, entre otros.
"Cuánto más pronto sea el diagnóstico, mejores son las posibilidades de sobrevivir. Cuantas más mujeres sepan del cáncer de ovario y de sus síntomas, mejor será", dijo Nagle.
LOS MEJORES TÉS
Para analizar el posible rol del té en la prevención de esta patología, los investigadores trabajaron con 2.700 mujeres. La mitad de ellas sufría de cáncer de ovario y la otra mitad estaba sana. Cada voluntaria respondió un cuestionario detallado sobre su dieta y estilo de vida, incluyendo el consumo diario del té.
"Nuestros resultados indican que tomar más de cuatro tazas por día de té negro, verde o de hierbas reduce el riesgo de sufrir cáncer de ovario en un 30%", dijo Nagle.
"Se cree que el té verde es el más sano de todos. Aunque los resultados de nuestro estudio no muestran un efecto más fuerte del té verde, la combinación de la evidencia de todo el mundo sugiere que tomar una o más tazas por día de esta infusión podría reducir en un 40% el riesgo de desarrollar un cáncer de ovario. Sin embargo, esto debe ser confirmado con más investigaciones", concluyó la autora.
NEOMUNDO
Dominicana crea herramienta de evaluación neuropsicológica
por: Miguelina Terrero
El estudio de Laura Gómez Liz puede determinar con efectividad, si una persona podría presentar demencia, o diagnosticar si realmente la tiene de cualquier tipo.
La preocupación por manejar los métodos adecuados a la hora de evaluar el nivel cognitivo, motivó que la psicóloga clínica dominicana Laura Gómez Liz creara una útil herramienta con una efectividad más fiable a la hora de determinar si una persona podría presentar demencia o diagnosticar si realmente la tiene de cualquier tipo.
La profesional, graduada en Unibe y con un PHD en neuropsicología realizado en España, inició esta investigación mientras trabajaba como parte del equipo de esta área en el hospital clínico de Salamanca. Dice que a su llegada allá, los neurólogos le referían pacientes para ser evaluados cognitivamente, para lo que tanto ella como sus compañeros la prueba que mas usaban era la denominada en su lenguaje DRS o Dementia Rating Scale, en español Escala de Clasificación de la Demencia.
“Me gustaba utilizarla por lo completa que resultaba, pero había un punto en que me preocupaba y es que cada aspecto evaluado tenía un valor numérico que se sumaba al final. Según la prueba, a partir de una puntuación específica, una persona se consideraba “normal" o con patología. Que "un solo número" determinara el grado cognitivo de una persona me parecía muy arriesgado, por más completa que fuese la prueba”, explicó. Es entonces cuando Gómez Liz propone al grupo de neurólogos del hospital de Salamanca, un método en el que los resultados de DRS fuesen más confiables. Todos accedieron y comenzaron a enviarle a casi todas las personas sanas y enfermas que veían en su consulta. Durante ese mismo tiempo participó en un estudio poblacional en un centro de salud de un barrio de Salamanca, en donde conseguió más personas para el estudio que quería realizar. Así transcurrieron cinco años en los que alcanzó a ver un total de 1, 100 sujetos que sobrepasaban los 60 años.
Lista para el estudio
Con ésta cantidad tomada como muestra, ya estaba lista para comenzar su estudio. De entre todos, cuenta que eligió las personas sanas, y utilizando un método estadístico conocido como Moans hizo una serie de "tablas normativas", en las que se dividían las personas por rangos de edad, de tal manera que para decir si una persona estaba o no normal, ya no se basarían únicamente en un "número" sino que, la considerarían dentro de un grupo de personas semejantes. Pero no solamente la edad era un factor importante a la hora de diagnosticar o no demencia o deterioro cognitivo, sino también el nivel educativo de las personas. “Notamos como a mayor educación, mejor resultado en las pruebas, incluso para aquellos individuos que sabíamos tenían déficit cognitivo. De ahí nos planteamos la interrogante de cómo podríamos solucionar esto, ya que, si continuaba así, las personas con más educación, pero con problemas que podrían conllevar a demencia, no se percatarían hasta que fuese demasiado tarde”. La profesional cuenta que en ese sentido siguió el mismo método estadístico y realizó un ajuste según el año de escolaridad, de manera que tampoco los años de educación fueran impedimento para realizar un diagnóstico correcto.
Aplicable en nuestro país
A la pregunta de si cuando regrese a ejercer en el país piensa aplicar aquí esas herramientas detalla que debido a que es una prueba que ha sido adaptada a grande escala, por un investigador , tiene todos los permisos para ser aplicada en un país de habla española, como el nuestro.
Sin embargo -dice- uno de los objetivos es precisamente, hacer normas aplicables directamente a nuestro país, salvo que ésta vez no tomaría tanto tiempo, ya que el "grueso del trabajo" está realizado. Laura se encuentra en España y adelanta que regresa pronto al país para poder ejercer en algún centro que sea de acceso a la mayor parte de personas posibles. “ Me gustaría trabajar a nivel privado con un equipo de colegas psicólogos, neurólogos (como en España) participando o creando en una unidad de evaluación integral e intervención en patologías cerebrales. Pero quiero aportar también a nivel público "mano a mano" con el pueblo, tanto en evaluar como en proveer soluciones a quienes lo requieran.
DRS
La dementia Rating Scale, DRS (Escala de clasificación de la demencia) es una de las más usadas en el campo de la neuropsicologia. Se trata de un conjunto de pruebas que estudian de manera global los aspectos cognitivos de una persona mayor de 50 años. A partir de éstas prueba (acompañado de un juicio clínico) , se puede decir si una persona tiene demencia, y aún más, si tiene riesgos de sufrirla en un futuro.
La neuropsicología
La neuropsicología estudia la relación entre el cerebro y la conducta. Esta área trabaja con personas que hayan sufrido traumatismos cranoencefálicos (lo que conocemos como "ataques cerebrales"), tumores, enfermedades neurodegenerativas (Alzheimer, Esclerosis múltiple, Parkinson) o enfermedades del desarrollo (Epilepsia, parálisis cerebral, trastorno de déficit de atención por hiperactividad). Además con personas normales, preocupadas por su evolución cognitiva (quejas de memoria, falta de concentración, etc) o a quienes el neurólogo o psicólogo refiera para ser evaluado cognitivamente.
La preocupación por manejar los métodos adecuados a la hora de evaluar el nivel cognitivo, motivó que la psicóloga clínica dominicana Laura Gómez Liz creara una útil herramienta con una efectividad más fiable a la hora de determinar si una persona podría presentar demencia o diagnosticar si realmente la tiene de cualquier tipo.
La profesional, graduada en Unibe y con un PHD en neuropsicología realizado en España, inició esta investigación mientras trabajaba como parte del equipo de esta área en el hospital clínico de Salamanca. Dice que a su llegada allá, los neurólogos le referían pacientes para ser evaluados cognitivamente, para lo que tanto ella como sus compañeros la prueba que mas usaban era la denominada en su lenguaje DRS o Dementia Rating Scale, en español Escala de Clasificación de la Demencia.
“Me gustaba utilizarla por lo completa que resultaba, pero había un punto en que me preocupaba y es que cada aspecto evaluado tenía un valor numérico que se sumaba al final. Según la prueba, a partir de una puntuación específica, una persona se consideraba “normal" o con patología. Que "un solo número" determinara el grado cognitivo de una persona me parecía muy arriesgado, por más completa que fuese la prueba”, explicó. Es entonces cuando Gómez Liz propone al grupo de neurólogos del hospital de Salamanca, un método en el que los resultados de DRS fuesen más confiables. Todos accedieron y comenzaron a enviarle a casi todas las personas sanas y enfermas que veían en su consulta. Durante ese mismo tiempo participó en un estudio poblacional en un centro de salud de un barrio de Salamanca, en donde conseguió más personas para el estudio que quería realizar. Así transcurrieron cinco años en los que alcanzó a ver un total de 1, 100 sujetos que sobrepasaban los 60 años.
Lista para el estudio
Con ésta cantidad tomada como muestra, ya estaba lista para comenzar su estudio. De entre todos, cuenta que eligió las personas sanas, y utilizando un método estadístico conocido como Moans hizo una serie de "tablas normativas", en las que se dividían las personas por rangos de edad, de tal manera que para decir si una persona estaba o no normal, ya no se basarían únicamente en un "número" sino que, la considerarían dentro de un grupo de personas semejantes. Pero no solamente la edad era un factor importante a la hora de diagnosticar o no demencia o deterioro cognitivo, sino también el nivel educativo de las personas. “Notamos como a mayor educación, mejor resultado en las pruebas, incluso para aquellos individuos que sabíamos tenían déficit cognitivo. De ahí nos planteamos la interrogante de cómo podríamos solucionar esto, ya que, si continuaba así, las personas con más educación, pero con problemas que podrían conllevar a demencia, no se percatarían hasta que fuese demasiado tarde”. La profesional cuenta que en ese sentido siguió el mismo método estadístico y realizó un ajuste según el año de escolaridad, de manera que tampoco los años de educación fueran impedimento para realizar un diagnóstico correcto.
Aplicable en nuestro país
A la pregunta de si cuando regrese a ejercer en el país piensa aplicar aquí esas herramientas detalla que debido a que es una prueba que ha sido adaptada a grande escala, por un investigador , tiene todos los permisos para ser aplicada en un país de habla española, como el nuestro.
Sin embargo -dice- uno de los objetivos es precisamente, hacer normas aplicables directamente a nuestro país, salvo que ésta vez no tomaría tanto tiempo, ya que el "grueso del trabajo" está realizado. Laura se encuentra en España y adelanta que regresa pronto al país para poder ejercer en algún centro que sea de acceso a la mayor parte de personas posibles. “ Me gustaría trabajar a nivel privado con un equipo de colegas psicólogos, neurólogos (como en España) participando o creando en una unidad de evaluación integral e intervención en patologías cerebrales. Pero quiero aportar también a nivel público "mano a mano" con el pueblo, tanto en evaluar como en proveer soluciones a quienes lo requieran.
DRS
La dementia Rating Scale, DRS (Escala de clasificación de la demencia) es una de las más usadas en el campo de la neuropsicologia. Se trata de un conjunto de pruebas que estudian de manera global los aspectos cognitivos de una persona mayor de 50 años. A partir de éstas prueba (acompañado de un juicio clínico) , se puede decir si una persona tiene demencia, y aún más, si tiene riesgos de sufrirla en un futuro.
La neuropsicología
La neuropsicología estudia la relación entre el cerebro y la conducta. Esta área trabaja con personas que hayan sufrido traumatismos cranoencefálicos (lo que conocemos como "ataques cerebrales"), tumores, enfermedades neurodegenerativas (Alzheimer, Esclerosis múltiple, Parkinson) o enfermedades del desarrollo (Epilepsia, parálisis cerebral, trastorno de déficit de atención por hiperactividad). Además con personas normales, preocupadas por su evolución cognitiva (quejas de memoria, falta de concentración, etc) o a quienes el neurólogo o psicólogo refiera para ser evaluado cognitivamente.
Hallan el secreto genético de la longevidad
Científicos identifican las variantes genéticas responsables de que una persona pueda vivir cien años o más.
Científicos en Estados Unidos afirman que lograron identificar cuáles son las variantes genéticas responsables de que una persona pueda vivir 100 años o más.
El hallazgo, dicen los investigadores, podría permitir algún día conocer de antemano si un individuo podrá gozar de una vida excepcionalmente larga.
Pero subrayan que los factores de estilo de vida y medio ambiente juegan también un papel muy importante.
Los detalles de la investigación, llevada a cabo en las escuelas de Salud Pública y de Medicina de la Universidad de Boston, Estados Unidos, aparecen publicados en la revista Science.
Desde hace tiempo los científicos creen que las personas que han logrado vivir vidas extraordinariamente largas, es decir, 100 años o más, son portadores de ciertas características genéticas responsables de esta supervivencia.
Ahora los investigadores lograron identificar una serie de alteraciones genéticas con las que -dicen- se puede predecir con 77% de precisión quién podrá vivir una vida centenaria.
Predicción de vida larga
Los investigadores llevaron a cabo un estudio para comparar los genomas de centenarios.
Desde hace tiempo, las personas de cien años o más han sido modelo de varios estudios porque, por lo general, la aparición de discapacidades propias de la vejez en ellos se retrasa hasta los 95 años.
Los científicos diseñaron un modelo genético para analizar los datos de más de 1.000 centenarios y de varias poblaciones de otras edades.
Descubrieron 150 alteraciones genéticas -conocidas como polimorfismos de nucleótido simple o SNP- con las cuales se puede predecir si una persona sobrevivirá los 90 años.
"Mujeres haciendo ejercicio"
En la investigación lograron además identificar 19 "firmas" genéticas (un subconjunto de genes cuya actividad confiere a las células sus características únicas) asociadas a la longevidad excepcional, que fueron encontradas en 90% de los centenarios estudiados.
Cada una de estas firmas, explican los investigadores, está asociada a variantes genéticas relacionadas con la prevalencia de enfermedades relacionadas a la vejez, como hipertensión o demencia.
Y los científicos descubrieron que 45% de los centenarios más viejos -los de 110 años o más- tenía una firma genética en particular que incluía la proporción más alta de alteraciones asociadas a la vejez.
Los investigadores creen que estos subconjuntos de genes podrían algún día ayudar a identificar a las personas que gozarán de una larga vida sana y a quienes sufrirán prematuramente los trastornos asociados a la vejez.
"Estas firmas genéticas son un nuevo avance hacia la genómica personalizada y la medicina de predicción" afirma el doctor Thomas Perls, geriatra del Centro Médico de Boston quien participó en el estudio.
"Y este método analítico podría ser útil en la prevención y detección de numerosas enfermedades, además de ayudar al desarrollo de fármacos 'a la medida'" agrega.
Los científicos creen que aunque este método de predicción de longevidad es muy preciso (77%), "no es perfecto".
"Esto confirma -dicen los investigadores- que los factores medioambientales y de estilo de vida también contribuyen de formas importantes en la capacidad de los humanos para sobrevivir a edades muy avanzadas".
La investigación fue financiada por el Instituto Nacional de la Vejez y el Instituto Nacional de Corazón, Pulmón y Sangre de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
Científicos en Estados Unidos afirman que lograron identificar cuáles son las variantes genéticas responsables de que una persona pueda vivir 100 años o más.
El hallazgo, dicen los investigadores, podría permitir algún día conocer de antemano si un individuo podrá gozar de una vida excepcionalmente larga.
Pero subrayan que los factores de estilo de vida y medio ambiente juegan también un papel muy importante.
Los detalles de la investigación, llevada a cabo en las escuelas de Salud Pública y de Medicina de la Universidad de Boston, Estados Unidos, aparecen publicados en la revista Science.
Desde hace tiempo los científicos creen que las personas que han logrado vivir vidas extraordinariamente largas, es decir, 100 años o más, son portadores de ciertas características genéticas responsables de esta supervivencia.
Ahora los investigadores lograron identificar una serie de alteraciones genéticas con las que -dicen- se puede predecir con 77% de precisión quién podrá vivir una vida centenaria.
Predicción de vida larga
Los investigadores llevaron a cabo un estudio para comparar los genomas de centenarios.
Desde hace tiempo, las personas de cien años o más han sido modelo de varios estudios porque, por lo general, la aparición de discapacidades propias de la vejez en ellos se retrasa hasta los 95 años.
Los científicos diseñaron un modelo genético para analizar los datos de más de 1.000 centenarios y de varias poblaciones de otras edades.
Descubrieron 150 alteraciones genéticas -conocidas como polimorfismos de nucleótido simple o SNP- con las cuales se puede predecir si una persona sobrevivirá los 90 años.
"Mujeres haciendo ejercicio"
En la investigación lograron además identificar 19 "firmas" genéticas (un subconjunto de genes cuya actividad confiere a las células sus características únicas) asociadas a la longevidad excepcional, que fueron encontradas en 90% de los centenarios estudiados.
Cada una de estas firmas, explican los investigadores, está asociada a variantes genéticas relacionadas con la prevalencia de enfermedades relacionadas a la vejez, como hipertensión o demencia.
Y los científicos descubrieron que 45% de los centenarios más viejos -los de 110 años o más- tenía una firma genética en particular que incluía la proporción más alta de alteraciones asociadas a la vejez.
Los investigadores creen que estos subconjuntos de genes podrían algún día ayudar a identificar a las personas que gozarán de una larga vida sana y a quienes sufrirán prematuramente los trastornos asociados a la vejez.
"Estas firmas genéticas son un nuevo avance hacia la genómica personalizada y la medicina de predicción" afirma el doctor Thomas Perls, geriatra del Centro Médico de Boston quien participó en el estudio.
"Y este método analítico podría ser útil en la prevención y detección de numerosas enfermedades, además de ayudar al desarrollo de fármacos 'a la medida'" agrega.
Los científicos creen que aunque este método de predicción de longevidad es muy preciso (77%), "no es perfecto".
"Esto confirma -dicen los investigadores- que los factores medioambientales y de estilo de vida también contribuyen de formas importantes en la capacidad de los humanos para sobrevivir a edades muy avanzadas".
La investigación fue financiada por el Instituto Nacional de la Vejez y el Instituto Nacional de Corazón, Pulmón y Sangre de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
BBC DE LONDRE
Cómo disminuir el uso y abuso de los antibióticos
La respuesta podría estar en la difusión de estrategias que contribuyen a la prevención de infecciones; aunque también en la utilización de inmunoestimulantes que ayudan a reforzar el sistema inmune volviéndolo menos vulnerable.
"Cuando se refuerza el sistema inmune, se lo prepara y por ende éste se vuelve menos vulnerable, es posible que disminuya la cantidad de antibióticos consumidos, principalmente porque bajan las posibilidades de contraer una patología viral o bacteriana", sostuvo el doctor Jorge San Juan, médico infectólogo, jefe del Departamento de Atención Intensiva del Paciente Infeccioso Crítico del Hospital Francisco J. Muñiz.
Esto quiere decir que trabajando no sólo sobre la prevención, sino también sobre la estimulación del sistema inmune, es posible disminuir el uso de estos medicamentos cuya efectividad en los últimos años ha ido mermado como consecuencia del crecimiento del fenómeno descripto como "resistencia bacteriana".
Este problema de salud pública al cual en su momento hizo referencia Alexander Fleming (descubridor de la penicilina), se caracteriza por la pérdida de efectividad de los antibióticos en el combate de infecciones, debido a que al popularizarse estos fármacos podrían autoadministrarse -algo que de hecho ocurre-, sometiéndose entonces los microbios a cantidades no letales que lejos de afectarlos podrían ayudarlos a volverse más resistentes.
"Hay muchos estudios realizados sobre este tema que por supuesto son muy interesantes. No obstante, lo que hay que remarcar es que nada reemplaza a nada. Esto quiere decir que de ninguna manera los antiobióticos pueden ser reemplazados, sino que lo ideal es que su acción sea reforzada y que se los ayude, más que nada para que cada vez sea posible recurrir a ellos en menor medida".
"¿Cómo se logra esto?: trabajando en la prevención y además recurriendo a otras herramientas como por ejemplo los inmunoestimulantes que son sumamente útiles para las personas que tienen enfermedades respiratorias crónicas", agregó el doctor San Juan.
Entre los inmunoestimulantes, se destaca uno de administración sublingual (desarrollado por el laboratorio Merck Serono) que genera anticuerpos contra el 78 % de las infecciones respiratorias y que reduciría notablemente el uso de antibióticos pues contiene fragmentos (lisado) de 48 billones de bacterias pertenecientes a las ocho especies que causan el 78 por ciento de las infecciones respiratorias.
"Las investigaciones clínicas han demostrado que el uso del inmunoestimulante sublingual disminuyó un 60 por ciento la necesidad de antibióticos. Se enfermaron menos personas y aquellas que contrajeron infecciones requirieron menos días de tratamiento", puntualizó el especialista.
Por ejemplo, un estudio llevado a cabo en niños con infecciones respiratorias recurrentes mostró una reducción significativa de los procesos infecciosos: el 68 % de los que recibieron el inmunoestimulante sublingual permanecieron libres de infección, contra un 37 % de los niños a los que se les administró otro tipo de inmunoestimulante.
Asimismo, la duración de los episodios y el consumo de antibióticos se redujo a la mitad en el grupo tratado con el inmunoestimulante sublingual.
"Estos resultados son importantes pero no debemos olvidarnos que también es sumamente necesario mantener el calendario de vacunación actualizado. Indudablemente cualquier medida preventiva es más eficaz si se cuenta con la principal herramienta de inmunización", postuló el doctor San Juan en consonancia con el doctor Carlos Luna, jefe de Neumonología Crítica, división Neumonología del Hospital de Clínicas José de San Martín, quién además destacó que "es fundamental llevar hábitos de vida higiénicos y saludables".
Para concluir es importante señalar que si bien las bacterias resistentes a los antibióticos no son más agresivas que las demás, sí son más difíciles de eliminar; por lo que pueden sobrevivir al antibiótico y proliferar. Además, poseen la capacidad de hacer que bacterias aún sensibles al antibiótico vuelvan a infectar a la persona, convirtiéndose en resistentes.
De:neomundo
La respuesta podría estar en la difusión de estrategias que contribuyen a la prevención de infecciones; aunque también en la utilización de inmunoestimulantes que ayudan a reforzar el sistema inmune volviéndolo menos vulnerable.
"Cuando se refuerza el sistema inmune, se lo prepara y por ende éste se vuelve menos vulnerable, es posible que disminuya la cantidad de antibióticos consumidos, principalmente porque bajan las posibilidades de contraer una patología viral o bacteriana", sostuvo el doctor Jorge San Juan, médico infectólogo, jefe del Departamento de Atención Intensiva del Paciente Infeccioso Crítico del Hospital Francisco J. Muñiz.
Esto quiere decir que trabajando no sólo sobre la prevención, sino también sobre la estimulación del sistema inmune, es posible disminuir el uso de estos medicamentos cuya efectividad en los últimos años ha ido mermado como consecuencia del crecimiento del fenómeno descripto como "resistencia bacteriana".
Este problema de salud pública al cual en su momento hizo referencia Alexander Fleming (descubridor de la penicilina), se caracteriza por la pérdida de efectividad de los antibióticos en el combate de infecciones, debido a que al popularizarse estos fármacos podrían autoadministrarse -algo que de hecho ocurre-, sometiéndose entonces los microbios a cantidades no letales que lejos de afectarlos podrían ayudarlos a volverse más resistentes.
"Hay muchos estudios realizados sobre este tema que por supuesto son muy interesantes. No obstante, lo que hay que remarcar es que nada reemplaza a nada. Esto quiere decir que de ninguna manera los antiobióticos pueden ser reemplazados, sino que lo ideal es que su acción sea reforzada y que se los ayude, más que nada para que cada vez sea posible recurrir a ellos en menor medida".
"¿Cómo se logra esto?: trabajando en la prevención y además recurriendo a otras herramientas como por ejemplo los inmunoestimulantes que son sumamente útiles para las personas que tienen enfermedades respiratorias crónicas", agregó el doctor San Juan.
Entre los inmunoestimulantes, se destaca uno de administración sublingual (desarrollado por el laboratorio Merck Serono) que genera anticuerpos contra el 78 % de las infecciones respiratorias y que reduciría notablemente el uso de antibióticos pues contiene fragmentos (lisado) de 48 billones de bacterias pertenecientes a las ocho especies que causan el 78 por ciento de las infecciones respiratorias.
"Las investigaciones clínicas han demostrado que el uso del inmunoestimulante sublingual disminuyó un 60 por ciento la necesidad de antibióticos. Se enfermaron menos personas y aquellas que contrajeron infecciones requirieron menos días de tratamiento", puntualizó el especialista.
Por ejemplo, un estudio llevado a cabo en niños con infecciones respiratorias recurrentes mostró una reducción significativa de los procesos infecciosos: el 68 % de los que recibieron el inmunoestimulante sublingual permanecieron libres de infección, contra un 37 % de los niños a los que se les administró otro tipo de inmunoestimulante.
Asimismo, la duración de los episodios y el consumo de antibióticos se redujo a la mitad en el grupo tratado con el inmunoestimulante sublingual.
"Estos resultados son importantes pero no debemos olvidarnos que también es sumamente necesario mantener el calendario de vacunación actualizado. Indudablemente cualquier medida preventiva es más eficaz si se cuenta con la principal herramienta de inmunización", postuló el doctor San Juan en consonancia con el doctor Carlos Luna, jefe de Neumonología Crítica, división Neumonología del Hospital de Clínicas José de San Martín, quién además destacó que "es fundamental llevar hábitos de vida higiénicos y saludables".
Para concluir es importante señalar que si bien las bacterias resistentes a los antibióticos no son más agresivas que las demás, sí son más difíciles de eliminar; por lo que pueden sobrevivir al antibiótico y proliferar. Además, poseen la capacidad de hacer que bacterias aún sensibles al antibiótico vuelvan a infectar a la persona, convirtiéndose en resistentes.
De:neomundo
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