Marihuana y cáncer testicular
El consumo frecuente o de largo plazo de la droga puede aumentar el riesgo de cáncer testicular, afirma un estudio.
El consumo frecuente y/o a largo plazo de marihuana podría aumentar significativamente el cáncer testicular, afirma una nueva investigación.
El estudio, llevado a cabo en Estados Unidos, encontró que los hombres que consumen la droga con regularidad, o durante mucho tiempo, tienen 70% más riesgo de desarrollar la enfermedad.
Y el riesgo, afirman los investigadores, es particularmente elevado -de casi el doble- entre los que consumen marihuana por lo menos una vez a la semana y/o han tenido una exposición a largo plazo de la droga, comenzando en la adolescencia.
Ésta, afirman los expertos, es la primera vez que se encuentra un vínculo entre el consumo de marihuana y la enfermedad.
"Nuestro estudio no es el primer que sugiere que algún aspecto del estilo de vida de un hombre o el medio ambiente es un factor de riesgo de cáncer testicular" afirma el doctor Stephen Schwartz, uno de los autores del estudio.
"Pero es el primero que analiza el consumo de la droga en relación a la enfermedad", agrega.
Los expertos subrayan sin embargo, que el estudio es muy pequeño para poder sacar una conclusión clara.
Más consumo, más cáncer
El cáncer testicular es uno de los cánceres más comunes en hombres jóvenes.
La incidencia en Europa y América del Norte es mucho mayor que en algunas otras partes del mundo.
La enfermedad ha estado aumentando de forma constante y hasta ahora no se tiene una razón aparente de este aumento.
Los factores de riesgo conocidos de este tipo de cáncer incluyen lesiones previas a los testículos, una historia familiar de la enfermedad, o haber tenido testículos sin descender siendo niño.
El nuevo estudio, llevado a cabo en el Centro de Investigación de Cáncer Fred Hutchinson, en Seattle, es el primer que analiza específicamente el consumo de marihuana en relación con la enfermedad.
En la investigación participaron 369 hombres de entre 18 y 44 años, que habían sido diagnosticados con cáncer testicular y se les interrogó sobre el consumo de la droga.
Posteriormente se comparó las respuestas con las de 1.000 hombres aparentemente sanos.
E incluso después de ajustar las cifras para tomar en cuenta otros factores conocidos de riesgo, el consumo de marihuana, afirman los autores, resultó ser el factor de riesgo más claro de la enfermedad.
Se encontró que los que fumaban la droga cuando se llevó a cabo el estudio mostraron 70% más riesgo.
Y los que la habían fumado regularmente o desde la adolescencia, tenían el doble de riesgo que los que nunca la habían fumado.
Los científicos encontraron también un vínculo entre el consumo de marihuana y el no seminoma, una forma de cáncer testicular que crece rápidamente, que suma aproximadamente 40% de todos los casos y tiende a afectar a los más jóvenes.
Adolescentes vulnerables
Los científicos creen que en la pubertad los jóvenes son más vulnerables a los factores medioambientales, como las sustancias químicas que se encuentran en la marihuana.
"Nuestro estudio apoya la teoría de que el mayor riesgo de cáncer testicular, en particular del tipo no seminoma, está asociado con el consumo de marihuana antes de los 18 años", afirma la doctora Janet Daling, otra de las autoras del estudio.
Se cree que la exposición crónica a la marihuana tiene varios efectos adversos en los sistemas endocrino y reproductivo, principalmente la disminución de la calidad del esperma.
Otros posibles efectos incluyen la reducción de testosterona y la impotencia.
Y como la esterilidad masculina y la pobre calidad de semen también han sido vinculados a un mayor riesgo de cáncer testicular, esto, creen los autores, apoya la teoría de que la marihuana es un factor de riesgo de la enfermedad.
"Lo que los jóvenes deben saber en primer lugar -afirma el doctor Schwartz- es que sabemos muy poco sobre las consecuencias a la salud a largo plazo del consumo de marihuana, especialmente el consumo frecuente".
"Y en segundo lugar, que nuestro estudio ofrece cierta evidencia de que el cáncer testicular podría ser una de estas consecuencias adversas", agrega el experto.
El siguiente paso, explica el investigador, será analizar más detalladamente las células en los testículos para ver si éstas poseen receptores capaces de responder a las sustancias químicas del cannabis.